Las Huellas De Mu
En los anos setentas lei "The Children of Mu", por James Churchward. Propone el en este libro que existio un continente llamado Mu, en el Oceano Pacifico, que se hundio desapareciendo como la Atlantida de Platon. Creo que la gente no pude adivinar cosas tan serias y tan enormes, sino que a base de pensar y pensar puede sacar conclusiones de datos que estan o estuvieron a su alcance, como Churchward que dice haber visto y estudiado una biblioteca de tablas de madera, las Tablas Naacal, en un monasterio que no identifica, en las estribaciones de los Montes Himalaya. Despues, las dos mil seiscientas tablas de piedra, las Tablas de Niven, con jeroglificos, que encontro William Niven en el subsuelo de Santiago Ahuizotla, que es ahora parte de la ciudad de Mexico. Dice Churchward que los jeroglificos de las Tablas de Niven se corresponden con los de las Tablas Naacal que a su vez narran la historia del Continente de Mu, que tuvo la civilizacion madre de las primeras civilizaciones, como la egipcia y la maya.Mu es una gran historia en libros pequenos. Pero, y las pruebas? Tienen que ir algunos a examinar las bibliotecas de tablas de madera de todos los monasterios de la India y el Tibet que estan en las estribaciones de los Montes Himalayas. Por mi parte, cuando tuve oportunidad, me lance a investigar en la ciudad de Mexico lo de las Tablas de Niven. Era a principios de los anos ochenta cuando en busca de las huellas del continente perdido de Mu anduve en tres edificios del Instituto Nacional de Antropologia e Historia, porque de uno me mandaban a otro, preguntando por unas tablas de piedra con escritura jeroglifica que habian sido desenterradas en la ciudad de Mexico. Yo pensaba que habiendo sido dos mil seiscientas todo mundo debia conocer su paradero. Pero nadie sabia nada de eso. Solo me informaron que el unico que podria contestar a mi pregunta era Felipe Solis, el experto numero uno en arqueologia del Valle de Mexico. El estaba en la direccion del Museo Nacional de Antropologia, en Chapultepec. Encontre su oficina en el sotano del Museo. Una senorita secretaria de el me dijo que Felipe Solis estaba fuera en una comision, que que se me ofrecia. Yo le dije que venia a preguntarle por unas tablas de piedra con escritura jeroglifica que se habian excavado en el Valle de Mexico. Ella, que como secretaria de Solis debia estar enterada, me pregunto que de donde habia obtenido dichos informes. Le respondi que lo habia leido en un libro americano, pero no le dije en cual, pues era mi garantia. Entonces ella exclamo: Ay, estos libros de ciencia-ficcion de los americanos! Cortesmente me despedi de la secretaria de Felipe Solis y subi a la biblioteca del Museo de Antropologia, donde esta catalogado mi libro: "Cronica de Santa Maria Chimalapa", y buscando Santiago Ahuizotla encontre un folleto en ingles escrito por Alfred M. Tozzer, publicado en l921, con datos ilustrados de las excavaciones que hizo Tozzer en l9l4 bajo las ruinas de un altar indigena. Dicho folleto se llama: "Excavation of a Site at Santiago Ahuizotla" by Alfred M. Tozzer.Entre los dibujos que aparecen en las fragmentos de ollas y cajetes de barro que encontro Tozzer, vi uno igual a una de las Tablas de Niven que estan dibujadas en el libro "The Children of Mu".Ya no podre yo ir a buscar las piedras de Niven al Museo de Houston, o al Museo Britanico, donde suponen que estan. Alguien lo habra hecho ya y no me he dado cuenta, o lo podra hacer proximamente. Aunque hayan dicho que eran falsificaciones, asi dijeron tambien de las pinturas de la Cueva de Altamira. Y con unas cuantas que sean autenticas y se correspondan con las Tablas Naacal, es suficiente para sacar a Mu de la ciencia-ficcion. Ademas, con lo que ha sucedido en Sumatra nos sentimos caminando en el borde entre Mu y todas las Atlantidas.